Siempre he pensado, que vosotras las mujeres, sois hijas del arco iris, y novias del fuego eterno y reconfortador del amor…
Tenéis la facultad, de mover con sutileza los hilos del placer. Os movéis por instintos innatos, siendo esclavas de vuestros propios nervios.
Conquistáis las almas, invadiendo las entrañas del ser…
Sois moneda perdida que siempre encuentra el camino de regreso.
Sopáis las nubes que se instalan en las cabezas, y en las crestas de las olas del ser.Tan pronto sois pradera fértil, como desierto árido.
¡Podéis introducir con cierta solemnidad en vuestra mochila amores y cuentos!!.
Sin vuestra presencia, la vida, estaría huérfana de amor. Confieso, que me siento un enamorado de ellas..
Si hay que correr a vuestro lado, seré un ciempiés. Si hay que trepar por vuestro cuerpo, me convertiré, en un mandril de cola dura…pero si hay que devorar, ¡empezad vosotras
primero!!.