El PSOE exige al Ayuntamiento que inicie las mediciones de ruido en Huelin

Vecinos de esta zona de Huelín, además de la calle Río Rocío, piden el cumplimiento de la moción socialista que pedía estrechar la vigilancia policial y realizar los controles de contaminación acústica durante la noche ante la preocupación de los vecinos por la falta de descanso.

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La viceportavoz socialista, Begoña Medina, ha reiterado al equipo de gobierno la necesidad de que se retomen “de una vez las mediciones de ruido en las calles Tomás de Echevarría y Río Rocío en la barriada de Huelin, donde se concentra gran cantidad de actividad durante la noche”.

Esta petición llega después de varias llamadas a la edil por parte de los vecinos, que aseguran “no poder descansar durante la noche porque las personas que acuden a las terrazas de los bares continúan haciendo ruido tras el cierre”. Así, Begoña Medina exige al Ayuntamiento que dé cumplimiento a los puntos aprobados durante la sesión plenaria del pasado mes de julio, en la que se pedían los controles de contaminación acústica, además de la vigilancia policial para garantizar el cumplimiento de los horarios de cierre de las terrazas y que las personas que se quedaban en la zona tras la clausura de los bares “no armen jaleo”.

“Están sumamente preocupados por la falta de descanso”, ha agregado la viceportavoz socialista alegando “decenas de llamadas recibidas por el grupo socialista durante los últimos días”. Precisamente, este problema les fue comunicado a los concejales del PSOE durante una reunión mantenida en una comunidad de propietarios de Tomás de Echevarría, una calle donde se concentra gran número de locales de copas con terraza. “Nuestra intención no es acabar con la actividad hostelera durante la noche, sino velar por el cumplimiento de las ordenanzas, como el respeto de las horas de cierre y que después de la 1.00 (según el último horario ordenado por las administraciones competentes), todo el mundo pueda descansar”.

Además, del ruido, otro caballo de batalla en esta zona es la falta de espacio para pasar por las aceras, “una petición que los residentes entonan desde hace años.

No se respetan las distancias mínimas de seguridad, ni para evitar la propagación del COVID19 ni para permitir el paso de las personas. Muchos menos para la gente que va en silla de ruedas o lleva carritos de bebés.

No pueden pasar salvo por fila de uno a uno en Tomás de Echevarría”. En el pleno de julio, “el grupo del Partido Popular puso condiciones para su voto a favor de nuestra moción: que la aplicación de las mediciones, que las debe realizar una empresa privada durante 24 horas en varios días y presentar un informe, se efectúen cuando haya disponibilidad presupuestaria para ello”.

Pues desde el PSOE no entienden por qué no se efectúan ahora, “que es cuando las demandas los vecinos, malagueños y malagueñas que pagan religiosamente sus impuestos y que necesitan que la Policía y el Ayuntamiento de Málaga vele por su descanso”.

Con el sueño de los vecinos no se juega

“Estamos aquí para buscar soluciones, no culpables. El objetivo es que los vecinos puedan descansar todas las noches, debemos compaginar el descanso de los vecinos”. Según datos arrojados por el Plan Municipal contra el ruido, “Carretera de Cádiz es el distrito que más sufre la contaminación acústica, ya que se superan los 55 decibelios (dBA) en un 43,5% durante la noche, mientras que en un 36,24% de las horas de luz se superan los 65 dBA”. La media de la ciudad gira en torno al 25% de las horas de luz con más de 65dBA y el 50% de la noche con registros superiores a los 55 dBA. “Es un hecho probado que el exceso de ruido produce efectos nocivos sobre la salud de las personas, destacando el nerviosismo, la irritabilidad, la ansiedad, el estrés, la falta de concentración y el cansancio”, ha manifestado Begoña Medina.

Para ello, Medina anima al equipo de gobierno a que “actúe de manera preventiva, puesto que sólo manda a técnicos municipales cuando se interpone una denuncia vecinal, para efectuar mediciones de contaminación, controlar la ocupación de las terrazas de hostelería y bares de copas, así como el correcto depósito de basura orgánica dentro de los contenedores para evitar plagas de cucarachas y ratas”. Según Begoña Medina, “los vecinos sólo solicitan el cumplimiento de las ordenanzas, ni más ni menos. Y esto es una injusticia que deja entrever la falta de acción de un equipo de gobierno dormido en los laureles”.

Por eso, la edil delegada del área de Sostenibilidad Medioambiental ha pedido “que se pongan en marcha medidas correctoras si se superan los niveles de ruido, para lo que pedimos que se lleven a cabo las mediciones de manera urgente, como están exigiendo los residentes de Tomás de Echevarría y Río Rocío”. También, la concejala socialista ha defendido que “si hay vigilancia policial, se disuade a los clientes de los bares de participar en aglomeraciones en la puerta de los negocios, que es la principal fuente de la emisión de ruido, seguida de los coches en doble a altas horas de la madrugada”.

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